Conocer los recursos disponibles tanto online como en la comunidad es fundamental para poder acceder a información y servicios confiables sobre anticoncepción y salud sexual. Cuando hablamos de servicios confiables y destinados a las personas jóvenes nos referimos a los servicios que presentan la sexualidad como algo positivo. La sexualidad es un aspecto fundamental de la vida y se vive y se expresa a través de los pensamientos, deseos, emociones, creencias, valores y conductas. Poder expresar la sexualidad abiertamente y con libertad es una necesidad humana y un derecho. Por eso, también es un derecho contar con recursos y servicios que pongan en valor los aspectos positivos de la sexualidad, no solo los posibles riesgos asociados. La información y los servicios de salud sexual y reproductiva para las personas jóvenes tienden a estar centrados en lo que no se debe hacer y en cómo evitar infecciones, en vez de en los aspectos positivos.
Al hablar de servicios confiables es importante nombrar algunas características, como que todo el entorno, incluyendo a los/as profesionales que trabajan ahí, los materiales y el espacio en sí mismo, promueva una comunicación abierta y accesible. En donde se pueda hablar y hacerlo muy abiertamente sobre sexualidad y relaciones sexuales, para que así, lo/as profesionales puedan orientar a las personas jóvenes de manera adecuada según lo que sea más apropiado para cada persona en particular. En la medida en que estos servicios presten atención a las inquietudes, los deseos, las necesidades y las realidades de las personas jóvenes, estos servicios podrán suministrar información que responda a las preguntas directas de las personas, pues el disfrute de una sexualidad positiva se basa en el reconocimiento de la autonomía y la individualidad. Y las personas jóvenes tienen el derecho a que se les hagan valer sus derechos sexuales y reproductivos.