¿Qué son las hormonas?
Las hormonas se mencionan mucho cuando se habla de anticonceptivos, pero exactamente ¿qué son? Son moléculas producidas por el sistema endocrino que envían mensajes a varias partes del cuerpo. El sistema endocrino y las hormonas ayudan a regular los procesos del cuerpo, como el hambre, la presión arterial y el deseo sexual, entre muchos otros procesos más. Si bien las hormonas son esenciales para la reproducción, son fundamentales para todas las funciones corporales, porque son las hormonas que fluyen por todo el cuerpo, las que les dicen a distintas partes del cuerpo que es lo que tienen que hacer. Es sencillo entender las hormonas si se imagina que estas son como pequeñas llaves que viajan por todo el cuerpo, en busca de los receptores hormonales, que son las cerraduras, así, como que cada llave abre su propia cerradura, cada hormona fomenta que se produzcan cosas distintas en el cuerpo.
Todos los cuerpos experimentan cambios hormonales constantemente durante el día. Al comer, se produce la hormona insulina para regular el azúcar en la sangre, cuando se siente miedo se produce la hormona adrenalina para responder con rapidez, también el sueño está regulado por la melatonina, que también es una hormona. Las hormonas están en todos los procesos corporales, y cuando no se equilibran correctamente, un trastorno endocrino puede ser la razón. Algunas personas son más sensibles a las hormonas que otras, por eso algunas personas sufren de síndrome premenstrual, mientras que otras no perciben los cambios hormonales tan drásticamente.
Cuando se habla de anticoncepción y hormonas, es relevante mencionar las glándulas que producen las hormonas sexuales, es decir los ovarios y los testículos. En estas glándulas se secretan las hormonas sexuales, que generan el ciclo menstrual o la creación de testosterona y espermatozoides. La pubertad, el desarrollo de los senos, la capacidad de quedar embarazada o producir esperma y el crecimiento del vello corporal están influenciados por las hormonas reproductivas. Los niveles de estas hormonas fluctúan a lo largo de la vida de una persona, generalmente disminuyendo a medida que una persona envejece.